1.- El domingo 2 de Diciembre habrá referéndum en Venezuela.
2.- El domingo 2 de Diciembre el país va ir al referéndum en Venezuela, bien como espectadores desde la barrera (los abstencionistas) o como actores en el escenario (los votantes).
En la sección de espectadores habrá diversidad de sentimientos: odio, rabia, nostalgia, reflexión, arrepentimiento, miedo, coraje, pero nunca indiferencia. Ellos estarán tan atentos a lo que pase, como los activos en la situación, pero desde su barrera, escenario ideal para construir o destruir, sólo desde el verbo, nunca con la acción.
A muchos militantes de esta sección, el domingo 2 de diciembre, les cruzará por la mente la nostálgica reflexión: “Cónchale” o una más común: ¿Por qué carajo no fui? Y se quedarán así, en un “cruzado de mente” y “un calladito de cobardía” que jamás expondrán públicamente en sus dialécticas en la barra, la fiesta o la reunión con amigos. Eso les va a pasar, porque vieron correr la historia en la acera del frente y no fueron capaces de cruzar la calle. Hasta allí llega la teoría.
En la sección de votantes, la cosa estará más animada, entre una y otra respuesta, la tensión estará en los niveles más altos. Quienes no se organizaron a tiempo, porque mañana siempre amanece y “ya habrá tiempo”, tratarán de estructurar una especie de captación por galope entre sus íntimos amigos, quienes sin decirlo para evitar ruptura de relaciones, se limitarán a preguntarse mentalmente:
- ¿Y qué le pasa a este amanecido con resfriado?
Entonces cuando se conozcan los resultados, dirán a manera de monólogo, pero en voz alta para que llegue claro a los alrededores: “la próxima vez tenemos que organizarnos más”.
Quienes si ganaron la calle, porque la vienen trabajando desde hace tiempo, tendrán otro tipo de señal, marcada de mucha faena, pero definitivamente optimista. Estas cosas van a pasar, porque definitivamente “de todo hay en la viña del Señor y en Venezuela no hay excepción”.
¿Qué puede pasar ahora y que definitivamente es bueno para el análisis? Una sola frase: “Reflexión a tiempo”.
Sí, a tiempo. En ningún país del mundo – y eso pueden buscarlo – se le ha consultado tanto a la gente, para la toma de acciones en macro. La Constitución de 1961 la hizo un grupito y nadie dijo nada, peor aún, nadie la leyó completa en 38 años. La constitución de 1999 se sometió a consulta popular y todo el mundo en 8 años la leyó completa. En cuanto a los referenda, el del domingo, será el segundo a escala nacional. El primero – y esta es una información veraz – se hizo, aun cuando aquella recolección de firmas fue fraudulenta, porque un sector de la canalla hizo trampas.
Que “la Constitución del 99 fue buena”; ¡Si! Eso no se niega, en su tiempo cumplió el objetivo, pero “todo tiene su tiempo” y “los nuevos tiempos” exigen más avance, mayor perfección, mayor engranaje, para que sean máximos los resultados. Venezuela ha ido en una evolución importante con marcados ascensos en economía, educación y salud, por citar tres ejemplos y reducciones significativas en desempleo y pobreza, por mencionar dos. Seguir por esta senda requiere de un soporte legal aun mayor, por eso la propuesta que está en escena.
Ponernos a explicar en este momento qué trata artículo por artículo la reforma, es un asunto de tiempo y porque además ya en la calle hay todo un abanico de información que se bate entre argumentos reales y distorsionados. Lo que si está muy claro, es que la gente sabe que no le van a quitar la casa, que aquí no hay ni habrá dictadura, porque ningún dictador somete tantas cosas a consulta del pueblo, no le van a quitar los hijos – esto ni siquiera consta en el texto a consultar – y así la verdad ante un “montón” de mentiras más.
¿Qué va a pasar el domingo? Definitivamente algo excepcional. El domingo se va a decidir un texto constitucional, pero más allá, se va a decidir si queremos ser libres de verdad o convertirnos en colonia. ¿Cómo es posible que el gobierno de Estados Unidos esté inyectando tanto dinero a sectores muy marcados de la oposición venezolana, para que no se apruebe este texto? ¿Qué tan bueno tiene la reforma para los venezolanos, que el gobierno estadounidense está tan angustiado? ¿Por qué la CIA está apretujando su Operación Tenaza y echa mano de estudiantes, iglesia, empresarios traidores, para revertir lo que es una verdad y va a pasar?
El domingo, otra vez podremos opinar. Tu que estás allí sentado leyendo esto, sabes que ese día, algo se va a transformar. Decide por la poesía o la frase, pero no te quedes allí campante como si no pasara nada. Tú también eres Venezuela.
POESIA: “Pasarás por la vida, sin saber que pasaste”
FRASE: “Me gusta cuando votas, porque ya no estás ausente”
Yo creo que SI tenemos una oportunidad de que nuestra opinión SI tenga un valor, despreciarla es la crónica del absurdo.
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